El presidente argentino y el mandatario brasileño mantienen discrepancias personales e ideológicas, y fue la primera vez que se encontraron cara a cara. El encuentro duró unos pocos segundos y contrastó con la amabilidad y distensión que Lula brindo a otros jefes de Estado, como la mexicana Claudia Sheinbaum, el francés Emmanuel Macron y el español Pedro Sánchez, entre otros.